La Pintura de Miren Zabala

Constantenente observamos como personas que se introducen en el mundo de la pintura, unas veces con vocación tardía y otras no tanto, pasado un tiempo se enfrían y abandonan. Es frecuente que surjan dudas, miedos a afrontar nuevas formas de trabajo, nuevos retos...etc.

Este, no es el caso de Miren Zabala. Hace años vengo admirando el que hacer de esta mujer, que con voluntad de amateur, periódicamente nos muestra sus últimos e interesantes trabajos.

Sus lienzos son amables, fundamentados en temas vascos, (esta idea se repite en su obra desde sus inicios), pinta nostálgicos paisajes, marinas, pequeñas embarcaciones, estampa de los muelles, naturalezas muertas y flores. La figura humana es también una constante en sus obras, a las que confiere un carácter anecdótico.

Con soltura en el pincel y una paleta rica y densa, Miren simplemente trata de revivir lo que los ojos ya han visto, de este modo consigue llegar al espectador y comunicar emociones.

Gracias a su conocimiento del dibujo, la figura humana tratada desde un punto de vista tradicional, complementa la composición de sus cuadros. Es patente la madurez adquirida en la última parte de su obra, pero también puede advertirse la necesidad de un cambio en posteriores trabajos para evitar manierismos al tratar este, siempre difícil tema de la figura humana.

Rosa Calzada.